viernes, mayo 13, 2016

Costa Rica:¿Y quién se robó mi BMW? Sobre la desarticulación de la cohesión social y la pauperización del pueblo costarricense


Costa Rica y su perverso modelo económico, desarticula día a día, los residuos de cohesión que aun sobreviven: in crescendo acumulación de riqueza en sectores como el financiero, y desplomándose la economía sostenida en el trabajo productivo real, como el sector agrario y agro-industrial. 

Las consecuencias se hacen entonces, a su vez, cada día más obvias, a decir, un apartheid amurallado de exclusión social, en el cual, la lucha por la sobrevivencia de los sectores poblacionales mayoritarios y excluidos, se acentúa y se traduce en una guerra de todos contra todos, en la ruptura de los filamentos de la cohesión social, que permitían niveles de convivencia humana, que hoy desparecen, iniciando por los viciados ambientes de violencia puertas adentro, esto es intrafamiliar, a la violencia diaria puertas afuera, producto de un Estado insolvente para cumplir sus funciones básicas, que se hace evidente en el caos de los servicios públicos, las pésimas infraestructuras, un sistema vehicular y de transportes colapsado y en violencia armada callejera, que se volvió cotidiana, desde asaltos a mano armada hasta los cotidianos asesinatos selectivos de bandas.

Ajusticiamiento de un sicario en Desamparados, San José, Costa Rica
Escenas como esta, cada vez son más frecuentes.
El narcotráfico internacional, es la otra cara del mercado libre transnacionalizado


¿Dónde está el crecimiento laboral, económico y social, con BMW incluidos, que prometieron los sectores políticos representantes de la oligarquía plutocrática de  Costa Rica, si se aprobaba el TLC - EE.UU. (CAFTA-DR) y demás Tratados de Comercio internacional?. Es obvio, que no sólo han sido una estafa económica, ha significado una regresión social, que se ha convertido en una caída en una espiral que parece no tener fin.   

 Costa Rica es el único país que incrementa su desigualdad en América Latina

De acuerdo al Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), se mostró una variación interanual de 4,7% en marzo de 2016, según datos de la tendencia ciclo publicados por el Banco Central de Costa Rica (BCCR). Si se analizan los detalles, queda en evidencia, quienes son los ganadores y quiénes son los perdedores, del modelo económico de tendencia "neoliberal", que se ha impuesto en Costa Rica en las últimas tres décadas, e institucionalizado por medio de una estructura jurídico-administrativa, alevosamente ensamblada, para la acumulación de riqueza en ciertos sectores privilegiados, y dejar a la libre, un desempleo que aumente desaforadamente el ejército industrial de reserva (Marx), se incrementen los índices de exclusión social, medidos por el Coeficiente de Gini, y que se traducen en una brutal pauperización humana, y en aumento de la pobreza y la miseria, que llega a niveles inéditos en los quintiles inferiores de la población costarricense, silenciosos y sin una voz con la cual exigir equidad o cuando menos cual pedir auxilio

martes, abril 26, 2016

Carmen Lyra, la Orquídea más Roja de la historia política de Costa Rica


Entrevista a Alfonso Chase,
en torno a la influencia que ejerció Carmen Lyra
  a nivel estético e ideológico en la formación  de la política costarricense.


Carmen Lyra, 
seudónimo de María Isabel Carvajal Quesada 
(San José, 15 de enero de 1887
- México, 14 de mayo de 1949)
Escritora, pedagoga y política costarricense de izquierda.

Desde finales del siglo XIX, y conforme el pueblo costarricense, gradualmente comienza a tener acceso a la educación básica y secundaria, despierta la conciencia de la clase obrera y proletaria, iniciándose un proceso de cambio social, y el motor de este cambio, será la lucha de clases. La conciencia de la propia clase social,  el reconocimiento de la propia miseria y explotación, frente a los privilegios y riqueza de unos reducidos grupos de la clase burguesa, es el caldo de cultivo de las luchas sociales que se suscitarán desde inicios del siglo XX, hasta desembocar en la Guerra Civil de 1948.  
Reflexionar sobre la propia historia, es clave, particularmente en un momento en que Costa Rica, se enfrenta a inicios del siglo XXI, a un recrudecimiento de la explotación laboral, a una mayor exclusión social, y teniendo la mayor cantidad de pobres en términos absolutos de toda su historia; aunado todo ello, a un conspicuo cinismo de una corrupta de clase política, que ha instaurado un sistema jurídico-administrativo, orientado a la acumulación de riqueza cuasi-faraónica en una cada vez más reducida oligarquía plutocrática; lo cual es sostenido por un amurallado apartheid de exclusión social in crescendo. 
En medio de este desolador panorama, resulta esperanzador, volver los ojos hacia el pasado y percatarnos, que en nuestra historia hubo hombres y mujeres, que surgieron entre los marginados, y tuvieron el valor de luchar en contra esa explotación humana, por parte de un poder oligárquico entronizado sobre la Costa Rica desde esa entonces. 
Las clases dominantes de Costa Rica, se han vuelto cada vez más reaccionarias, acaparadoras de los recursos sociales y excluyentes de las clases sociales pauperizadas. Se trata de un poder oligárquico que no sólo se ha negado a hacer nuevas concesiones sociales, sino cada vez impone sus cuotas de poder al sector político, para inmunizar cualquier posible cambio jurídico, administrativo o hacendario, que perjudique sus intereses. Una evidente muestra de ello, han sido los éxitos iterativos, para evitar cualquier tipo de reforma tributaria progresiva y con un sentido socialmente distributivo. A la vez, el asedio a los últimos residuos de las instituciones de bienestar social, en lo educativo, en la salud y sobre los recursos energéticos, es cada vez más implacable, en función de una deliberada estrategia de privatización acaparativa
La plutocracia oligocrática que se se ha empoderado en la Costa Rica del siglo XXI, al no tener un contrapeso significativo, al servirse de una fauna política genuflexa de turno, al tener el aparato mediático masivo en favor de sus matrices desinformativas; como también, al tener a su servicio los mismos aparatos coercitivos del estado;  les permite refugiarse en sus mansiones amuralladas, protegidas por un cada vez más grande ejército de seguridad privada; y, desde ahí, decidir, cuáles serán los representantes políticos que les convienen sean electos o cuáles no, cuáles son los grandes negocios que deberán institucionalizarse en la próxima legislatura y cuáles son las instituciones públicas que deben desmantelarse o venderse al mejor postor.
Por ello, los sectores plutócratas, se encuentran obnubilados en su poder cuasi-absoluto y por su cada vez más marcado desprecio hacia las cada vez más indefensas clases trabajadoras, explotadas y pauperizadas en función de sus intereses; y al no tener ningún contrapeso significativo, muestran sin empacho que no les interesa compartir los recursos sociales de la nación costarricense, que cada día acaparan avariciosamente con mayor ímpetu. 
Aquellos recursos e instituciones que aun no han sido copadas por los tentáculos políticos y económicos de los sectores oligocráticos y que se convierten en la excepción, son producto de aquellas reivindicaciones sociales, logradas en otros momentos históricos por las luchas orgánicas levantadas por los sectores excluidos. 
En la historia costarricense, sólo cuando la clase dominante, se ha sentido amenazada por la fuerza reivindicatoria de las masas organizadas, esto es, por medio de las luchas sociales, es que se dieron algunos cambios paulatinos, como los acontecidos en los años 20´s, 30´s y 40´s del siglo XX, que permitieron imponer muy a pesar de los grupos oligárquicos y plutocráticos, reformas sociales, que cambiaron las características de la nación costarricense, e hicieron de Costa Rica, un país más inclusivo, al menos durante unas décadas, aunque eso se volvió a revertir, a fines del siglo XX e inicios del XXI,  en favor de los sectores plutocráticos dominantes.  
Por ello la tensión dialéctica entre el capital y el trabajo, se ha acrecentado en las últimas décadas, permitiendo que la cohesión social de un pueblo desarticulado ideológicamente, germine en brotes dispersos de protestas, que gradualmente van dando organicidad a las clases marginadas y excluidas, lo que se traduce paso a paso en la toma cada vez mayor de su conciencia de clase trabajadora, y que por ende, exige un nuevo tipo de gobernanza, a decir, un inexorable cambio radical, de su situación actual. 
La experiencia histórica, demuestra que los derechos sociales no se imploran, se toman por asalto, en contra de los asaltadores de los recursos sociales, que le pertenecen a toda la nación, a todos sus ciudadanos, y no tan sólo a un reducido sector, que se considera dueño de los mismos y del resto de seres humanos, quienes son sometidos a diversas formas de esclavismo asalariado. 



Una de las figuras señeras en la historia patria, es sin lugar a dudas: Carmen Lyra, o María Isabel Carvajal Quesada, que si Rosa Luxemburgo fue la Rosa más Roja, de las luchas proletarias europeas a inicios del siglo XX, Carmen Lyra, fue sin duda la Orquídea más Roja de la historia política costarricense.  
Carmen Lyra pasa a la historia patria, no sólo por el aporte estético a literatura costarricense, como una de sus representantes más conspicuas, sino por sus luchas sociales, en nombre de la clase obrera.  En 1919 encabeza la lucha contra la dictadura de los Tinoco y en una manifestación de protesta iniciada por las maestras de San José, arenga a la multitud, la cual enardecida termina por quemar el diario del gobierno:  "La Información". Es perseguida por la policía a la cual logra evadir disfrazada de vendedora de periódicos. En 1931 entró a formar parte del Partido Comunista, donde se integró con pasión y con alta exigencia intelectual. Formó, con Luisa González, el Sindicato Único de Mujeres Trabajadoras y propuso la creación de la Organización de Maestras Costarricenses. 
Es la escritora que más cerca está del realismo en sus inicios en nuestro país. Ha sido considerada la fundadora de la narrativa de tendencia realista social en nuestra patria, luego de escribir sus interesantes cuentos: “Bananos y Hombres” y “Siluetas de la Maternal” que le dieron un gran renombre en nuestra patria y en el extranjero. Sin embargo la obra más conocida en su trayectoria literaria es la popular Cuentos de mi Tía Panchita, publicados en 1920 por su gran amigo Joaquín García Monge, y de la cual se han hecho numerosas ediciones. El resto de su obra quedó repartida en periódicos y revistas, entre ellas “Bananos y Hombres” (1933), cuento que inicia, con gran realismo la literatura de las bananeras.
Otras obras suyas son: En una silla de ruedas (1918), Las fantasías de Juan Silvestre (1918), Obras completas (1972), La cucarachita mandinga (1976), Relatos escogidos (1977) y Los otros cuentos de Carmen Lyra (1985).
Los últimos años de su vida se dedicó por entero a la actividad política, destacándose en este campo como periodista expositora de ideas y como hábil dirigente del Partido Vanguardia Popular (comunista). Luego de la caída del gobierno del presidente Teodoro Picado, al concluir la guerra civil de 1948, viajó fuera del país el 23 de abril y se exilió en México ya con su salud quebrantada. Solicitó su retorno, pero éste le fue denegado y el 14 de mayo de 1949 murió lejos de su país. Solicitó su retorno, pero éste le fue denegado y el 13 o el 14 de mayo de 1949, no hay seguridad de cuál de los dos días, murió en el exilio, añorando volver a su tierra, Sus restos llegaron el 20 de mayo y fueron sepultados el 22 de mayo en el Cementerio General de la ciudad de San José.

Paso Llano, San José de la Montaña, 1940.  
En una reunión con un grupo de sus amigos,
entre los cuales se encuentran
Manuel Mora V., Carlos Luis Sáenz, Arnoldo Ferreto, 
Adela Ferreto de Sáenz y Luisa González.

domingo, febrero 01, 2015

La pseudociencia de la economía burguesa: el error Reinhart-Rogoff

  Carmen Reinhart & Kenneth Rogoff

En 2010, los economistas Carmen Reinhart y Kenneth Rogoff presentaron un artículo titulado “Crecimiento en un momento de Deuda Pública”. El principal resultado de su investigación es que … la tasa media de crecimiento para países con una deuda pública por encima del 90% del PIB es aproximadamente un 1% menor que si la deuda fuera menor. En promedio, las tasas medias de crecimiento son varios puntos porcentuales menores”. De hecho, países con una relación deuda / PIB por encima del 90% tienen una tasa promedio de crecimiento ligeramente negativa.
Esta ha sido una de las estadísticas más citadas en los debates públicos durante la Gran Recesión. 
La teoría de Paul RyanCamino hacia la Prosperidad presupuestaria” se hace eco de este resultado: “encontraron evidencias empíricas de que exceder el 90% [de deuda pública] de la economía tiene un significativo efecto en el crecimiento económico”. 
El consejo editorial del “Washington Post” considera el estudio como un consenso económico, manifestando que “la relación deuda pública/PIB podría seguir creciendo – y acercarse peligrosamente al limite del 90% que los economistas consideran como una amenaza para un crecimiento económico sostenido
¿Es concluyente? 
En respuesta se ha argumentado que la causa es a la inversa, que la disminución del crecimiento conlleva un aumento de la tasa deuda pública / PIB.  Josh Bivens y John Irons sostuvieron este argumento en el Economic Policy Institute. Pero su argumento asume que los datos son correctos.  Desde el principio ha habido quejas porque Reinhart y Rogoff no entregaban los datos en que se fundamentaba su estudio (Dean Baker). Muchos especialistas  trataron de reproducir los resultados chocando con un muro a diestra y siniestra y no pudieron reproducirlos.
En un reciente artículo "¿Suprime significativamente la Deuda Pública el Crecimiento Económico?" en realidad  una crítica a Reinhart y Rogoff” de Thomas Herndon, Michael Ash y Robert Pollin de la universidad de Massachusetts, contradicen con éxito los resultados.  Después de tratar de replicar los resultados de Reinhart y Rogoff y no conseguirlo se pusieron en contacto con ellos y pudieron acceder a los datos originales que estos habían utilizado. Esto les permitió determinar cómo se habían construido estos datos.
En aquel momento se evidencian tres problemas: 
1) El primero es que Reinhart y Rogoff excluyen selectivamente años de alta deuda pública y con crecimiento económico medio. 
2) El segundo es que usan un discutible método de ponderación de los países. 
3) Tercero, parece ser que  también hay errores de programación de la hoja de cálculo, excluyendo países con niveles altos de deuda pública y crecimiento económico  promedio. Estos tres sesgos sostienen sus resultados y sin ellos no se pueden obtener. 
Exclusiones Selectivas. 
Reinhart y Rogoff usan el periodo 1946-2009 como su periodo, siendo su año inicial aquel con la principal diferencia  entre los países estudiados. El conjunto de datos contiene 110 años de datos disponibles para los países que tienen una ratio deuda pública / PIB por encima del 90% pero solo toma 96 de esos años. El artículo no especifica qué años excluyeron ni por qué. Herndon-Ash-Pollin encontraron que excluyeron Australia (1946-1950), Nueva Zelanda (1946-1949) y Canadá (1946-1950). 
Esto tiene  consecuencias, ya que estos países tienen una elevada deuda pública y a la vez un sólido crecimiento económico. Canadá tuvo una ratio deuda pública / PIB por encima del 90% durante el periodo excluido con un 3% de crecimiento del PIB. 
Nueva Zelanda tuvo una ratio deuda pública/PIB  por encima del 90% durante el periodo 1946-1951. Si se calcula el valor medio de la tasa de crecimiento para dicho periodo, encontramos que  se trata del 2.58%. Si solo se tiene en cuenta el último año, como hacen Reinhart y Rogoff, se conoce que la tasa de crecimiento es de -7.6%.  Ésa es una gran diferencia, especialmente si consideramos como han ponderado los países.
Ponderaciones poco convencionales. Reinhart y Rogoff dividen los años de los países por tramos de ratios de deuda pública / PIB. Así, toman el valor promedio del crecimiento real para cada país dentro de dichos tramos. La tasa de crecimiento de los 19 años que Gran Bretaña está por encima del 90% de la ratio deuda pública / PIB son promediados y se convierten en un solo número. Estos números de país se promedian, sin ponderar, para calcular la media aritmética del peso del crecimiento del PIB real.
Un ejemplo para entenderlo mejor. Gran Bretaña tiene 19 años (1946-1964) por encima del 90% de la ratio deuda pública/PIB con un valor promedio de 2.4 % de tasa de crecimiento.
Nueva Zelanda tiene un solo año en la muestra de datos por encima del 90% de la ratio deudapública / PIB con una tasa de crecimiento de -7.6%. Estos dos números, 2.4% y -7.6% son ponderados de igual forma en el cálculo final como si promediasen ambos países de igual forma. Y esto aunque Gran Bretaña tiene 19 veces más puntos de datos que Nueva Zelanda.
Ahora, podría ocurrir que no se quisieran ponderar de igual forma los años (Herdon,Ash y Pollin consideran correlaciones de series como una posibilidad). Puede ser que quieras tomar episodios. Pero esta ponderación reduce significativamente la media aritmética; si uno pondera por el número de años encuentra un mayor crecimiento por encima del 90%. Reinhart y Rogoff no discuten en su artículo esta metodología, tampoco el hecho de que están ponderando de esta manera ni su justificación.
Error en la programación de la hoja de cálculo. 
Herndon, Ash y Pollin muestran que: “Un error de Reinhart y Rogoff en la programación de la  hoja de cálculo excluye completamente cinco países, Australia, Austria, Bélgica, Canadá y Dinamarca, del análisis. Reinhart y Rogoff  promedian los datos en las celdas de las líneas 30 a 44 en lugar de las líneas 30 a 49 … este error en la hoja de cálculo … es responsable de -0.3 puntos de porcentaje de error en los datos publicados por Reinhart y Rogoff sobre el promedio real del crecimiento del PIB en la categoría  mayor de la ratio deuda pública / PIB”.
Bélgica, en particular, tiene 26 años por encima de la ratio del 90% de deuda pública/PIB con un promedio de tasa de crecimiento del 2.6% (aunque solo se le ha contado como un único punto debido a la ponderación mencionada anteriormente) 
En el siguiente gráfico se puede ver la caja azul de Excel para las fórmulas donde se aprecian los datos omitidos(imagen adjunta):
 La equivocación de Reinhart y Rogoff, es decir uno de los pilares argumentales empíricos que proporcionan los fundamentos intelectuales para el desplazamiento global hacia la austeridad a principios de 2010 se basó en que alguien accidentalmente no actualizó una fórmula en una fila en una hoja de cálculo Excel.
Por tanto, Herndon, Ash y Pollin  han encontrado que “la tasa promedio de crecimiento real del  PIB para países que acarrean una ratio deuda pública / PIB por encima del 90% es realmente 2.2% y no -0.1% como pretendían Reinhart y  Rogoff”.  Estudiando los datos en profundidad han sido incapaces de encontrar un punto límite donde el crecimiento caiga rápida y significativamente. También se evidencia de manera clara por qué deberían mostrar sus datos online, así podrían probablemente ser revisados. 
Pero más allá de todo esto, analizando los datos y cuánto pueden colapsar debido a esta o a aquella asunción, se deriva claramente que no hay números mágicos ahí fuera. La deuda necesita ser tenida en cuenta como una respuesta a las circunstancias contingentes que padecen las economías en todo el mundo: desempleo masivo, una Reserva Federal (FED, EE.UU.) tratando desesperadamente de ganar tracción en el nivel cero más bajo y una diferencia entre lo que podríamos producir y lo que realmente se produce. 

sábado, enero 03, 2015

Los Hedge Funds, el marginalismo austríaco y la debacle económica mundial

En la desregulación, de los instrumentos financieros derivados, se encuentra en el núcleo del desplome económico mundial, que terminaron por convertirse en activos tóxicos. El problema de base, no ha sido resuelto aun, sino todo lo contrario, se han inyectado billones de dólares/euros en rescates bancarios, a partir de los erarios públicos, lo cual ha anulado el "riesgo moral" de los agentes de mercado; por lo que ahora, se encuentran en plena desregulación, en libertad total de flujo de capitales y activos, y sin atender a ningún principio de riesgo/incertidumbre de mercados; esto pues, cualquier fracaso de los agentes de mercado, se convertiría en sistémico y por ende, serán rescatados por lo que los Bancos Centrales, los cuales seguirán emitiendo deuda inorgánica pública para salvar las deudas privadas. Entonces, la pregunta no es si todo el sistema económico global está destinado a caerse, sino ¿cuánto podrán los erarios públicos y las divisas nacionales, seguir sosteniendo este tipo de deudas privadas.

Una de las expresiones más conspicuas del tipo de movimientos financieros que requieren plena libertad económica, el libre flujo de capitales desregulados, son los fondos de inversión libre o Hedge Funds (Fondos de cobertura). El objetivo de un hedge fund es revalorizar el dinero depositado por los inversores, y para ello se acude a todos los mercados financieros (acciones, deuda privada, deuda pública, futuros, etc.) buscando rentabilidades. Es decir, se trata de especular sin riesgo, y para eso prácticamente todo vale. 
Pero, surgen diversas preguntas, como: ¿qué da el valor a los capitales dinerarios utilizados en este tipo de movimientos financieros?, ¿de dónde provienen?, ¿cómo se han producido?. ¿Cómo se establece el valor/precio de un servicio o de un bien (mercancía?, ¿Oferta versus demanda?, ¿Valores marginales subjetivos?, ¿Valores de presente versus valores de futuro?, ¿cuál es el vínculo de los precios/valores con la economía productiva real?. 
El marginalismo económico, es una teoría económica, que ha permeado los mercados financieros. De tal manera que se establecen valores presentes, sobre la base del precios futuros, es decir, es el teorema de la utilidad marginal, desarrollada por la Escuela Austríaca, por economistas burgueses como Carl Menger, E. von Böhm Baverek o F. Hayek. Las tesis de la utilidad marginal de la escuela austriaca de economía, son las que facultaron la creación de gigantescas ficciones financieras, convirtiendo pasivos (deuda privada), en activos financieros derivados sobre utilidades futuras, y los cuales, cuando el soporte financiero proveniente del sector trabajo, de los ahorrantes, de los cotizantes, de los casa-habientes, de los sustentadores de valor-trabajo real, no pudieron soportar la gigantesca pirámide Ponzi invertida que recaía sobre sus espaldas, todo el esquema financiero de desplomó, y se dejó caer todo el peso destructivo sobre los trabajadores y los casa-habientes.  Un caso, del poder de estos tipos de instrumentos financieros desregulados, lo mostró George Soros, quien utilizó su Hedge Fund para especular contra la libra esterlina. Primero George Soros pidió prestado 15.000 millones de libras esterlinas, y las cambió sigilosamente a dólares. El objetivo de Soros era apostar en corto con las libras, es decir, apostar a que perderían valor. Cuando tenía todo preparado y quiso atacar se las arregló para que fuera muy sonado: convocó a los medios y anunció que estaba convencido de que la libra caería.
Entonces vendió masivamente sus libras prestadas y envió así la señal al mercado de que la libra caía de verdad (en efecto, la venta masiva, sumada al miedo del resto de tenedores de libras(psicología de rebaño), hizo que cayera). El gobierno británico respondió con todas sus armas de política monetaria, pero tras gastar más de 50.000 millones de dólares tuvo que rendirse: los especuladores le habían vencido. Con la libra por los suelos Soros compró 15.000 millones de libras (que ahora valían muchos menos dólares) y las devolvió (era un préstamo). Las ganancias fueron descomunales, y la enseñanza más: un especulador, a partir de la desregulación promovida por los criterios de libertad económica,  uno solo, podía hundir a un país entero, pero cientos o miles, se encargaron de hundir el mundo. Por eso, es fácil evidenciar que  tras los países mejor rankeados con los índices de libertad económica, se ocultan las mayores deudas privadas del mundo, que luego son convertidas en deudas públicas (bail-out), transfierendo los costos de la bacanal privada de los mercados a los activos de los estados, a los servicios sociales, de salud y de educación, al trabajo y la vivienda de millones de personas y finalmente a los recursos de los ahorrantes bancarios (bail-in). Es una tragedia planetaria, producto de los dogmas del fundamentalismo de mercado y del mercenarismo financiero derivado. 


viernes, octubre 31, 2014

Costa Rica: Una espiral creciente de pauperización y regresión social

Indicadores de Coeficiente de Gini en América Latina y el Caribe

Los datos del Informe sobre Desarrollo Humano  del 2013,  y que fueron liberados por medio del Google Public Data Explorer, el cual  permite generar gráficos interactivos y personalizados. Aun así, es posible tener acceso al índice sobre la desigualdad en los ingresos, que es un instrumento de aproximación operativa a los grados de exclusión social o de pauperización, y que es conocido como: "Coeficiente de Gini".  

América Latina ha sido catalogado como el continente con más desigualdad social, cuyas causales habría que buscarlas en su historia colonial y  su más reciente historia de neocolonialismo. Una etapa en la cual aun se encuentra inmersa, lo que representa varias tensiones dialécticas, externas e internas. Una externa entre la injerencia en los asuntos internos por parte de potencias neocolonialistas y la identidad como estados nacionales, soberanos e independientes. Y las internas como la tensión entre capital y trabajo, típica de una lucha de clases entre obreros y burgueses, y que más recientemente, ha sido descentrada en tensiones entre diversos intereses capitalistas y movimientos reivindicativos dispersos (-ecologismo, feminismo, indigenismo, sindicalismo, solidarismo, etc.-), sin un solo frente en común, sin lograr una identidad de clase social; situación que ha permitido más fácilmente que tanto los grandes capitales locales, como los transnacionales, establecezcan o manipulen sin mucha fricción, las pautas tanto económicas, jurídicas como políticas; lo que desemboca en la concentración de grandes capitales en pequeños sectores y el aumento de la miseria y pauperización en el grueso de la población latinoamericana. 

No obstante, visto en perspectiva, resulta particularmente alarmante, cómo a partir de las reformas neo-liberales impuestas en Costa Rica a mediados de los años 80´s del siglo XX, y cuyo ideario se tradujo en un recetario denominado como: Consenso de Washington, el cual fue aplicado a pie juntillas, desde los Programas de Ajuste Estructural hasta la ratificación del CAFTA-DR, es posible establecer un paralelo, con un franco retroceso en los indicadores de desarrollo social que se habían logrado en las décadas anteriores.
Las políticas económicas, impuestas en las últimas tres décadas e inspiradas en el Consenso de Washington, permitieron tanto de manera explícita, como de manera velada, desmantelar o reducir a un mínimo funcional e impedir su crecimiento, muchas de las instituciones estatales, dada la anatemización del gasto social y del tamaño del estado(-mitos neoliberales hoy abandonados-). De tales directrices, se siguió que muchas instituciones estatales fueron privatizadas, o convertidas en cascarones huecos, para permitir en su lugar el surgimiento de empresas privadas, tanto de capital local, como transnacionales. Pero para que estas suplieran las funciones de muchas de las instituciones sociales, era necesario eliminar o debilitar estas últimas. Un simple ejemplo es el CNP. Cuando el Presidente Rafael Ángel Calderón Guardia, estableció sus reformas sociales en los años 40´s del siglo XX, tuvo que hacer ajustes en una Constitución de la República, herencia de los liberales de fines del siglo XIX, para que la nueva legislación y sus instituciones derivadas fueran compatibles y funcionales. Entre ellos, se encontró el Consejo Nacional de Producción (CNP), que permitió a las clases bajas a acceder alimentos subvencionados por el Estado.