Tras los países mejor rankeados con los índices de libertad
económica, se ocultan las mayores deudas privadas del mundo, que luego
son convertidas en deudas públicas (bail-out), transfierendo los costos
de la bacanal privada de los mercados a los activos de los estados, a
los servicios sociales, de salud y de educación, al trabajo y la
vivienda de millones de personas y finalmente a los recursos de los
ahorrantes bancarios (bail-in). Es una tragedia planetaria, producto de
los dogmas del fundamentalismo de mercado y del mercenarismo financiero
derivado.
La manera alevosa de manipular la información por parte de los
exponentes de la economía burguesa, quedó en evidencia recientemente, en
lo que se ha denominado como "error" de Reinhart y Rogoff (- Ver: La pseudociencia de la economía burguesa: el error Reinhart-Rogoff -), que más que un simple error, es un horror descomunal que ha tenido
implicaciones sobre los rescates financieros de muchas naciones y
millones de personas.
Pero, también queda en evidencia, que este tipo de economistas,
distan mucho de ser científicos buscando resultados fiables,
conocimiento verdadero, pues son más bien un tipo de ideólogos, al
servicio de las agendas de algunos sectores de poder económico mundial,
por lo que sus informes, no sólo fraccionan la realidad de los sistemas
económicos concretos, sino que permiten justificar teóricamente la toma
de decisiones que garantiza la acumulación dineraria en una parte y el
sacrificio del presente y el futuro económico y social de millones de
personas.
Tal fragmentación de la realidad, las
farsas teóricas, falacias y falsedades, son comunes entre este tipo de
ideólogos, que en no pocas ocasiones se autodenominan "liberales" y
defensores de la "libertad económica" de las naciones.
No obstante, descubrir el error de Reinhart y Rogoff,
no sólo es una prueba patente, que ni se sigue una metodología de
investigación científica, ni se asume responsabilidad ética sobre los
impactos sociales de tales resultados, pues son millones de seres
humanos, en sus necesidades básicas que se verán afectadas. De hecho, el análisis de la deuda realizado por Reinhart y Rogoff es fragmentario, dado que rinde única importancia al endeudamiento público (de ahí la exigencia de los planes de austeridad a muchas naciones) pero genera una exclusión selectiva alevosa, cuando invisiviliza los peligros de la deuda privada.
El
informe de marras, asume sus resultados como objetivamente
"científicos", y se toman como punto de partida para instaurar los
planes de austeridad que hoy tienen a Europa en una recesión tan brutal como innecesaria. Este es el momento, que no se han exigido las explicaciones, sobre el hecho qué dejaron fuera la deuda privada, que es la que hoy tiene paralizada la economía por el efecto del desapalancamiento.
Ni mucho menos, se ha tomado en consideración los errores y sesgos
descubiertos en el infome, para corregir los errores y cambiar las
políticas económicas sobre los países de la zona euro.
El Wall Street Journal publicó un mapa
interactivo con la evolución de la deuda pública y privada como
porcentaje del PIB desde 1990 hasta 2012, para una importante cantidad
de países, incluyendo a los más grandes y endeudados como Estados
Unidos, Japón, Holanda, Reino Unido, Alemania, España e Italia, que he
reunido en esta gráfica.
Resulta particularmente preocupante, cómo los agentes causantes de la crisis mundial, no sólo no han resuelto los factores que hicieron estallar la burbuja subprime, sino todo lo contrario, se han mantenido, dentro de una inmensa bacanal de endeudamiento privado, de especulación bursátil con instrumentos derivados, que fue lo que llevó a un nivel de insolvencia tal, por parte las deudas privadas, tanto del sector financiero como corporativo, que
tuvieron que ser asumidas por los estados y se convirtieron en deudas
públicas, generando una espiral en ascenso, tanto de las deudas
privadas, como de las deudas públicas, y que obligan al erario público a
hacer gigantescas emisiones dinerarias inorgánicas, para
realizar rescates financieros billonarios al sector privado, por parte
del los Bancos Centrales, y que más que ser una solución
temporal, cinco años después, parece haberse convertido en permanente,
mostrando que las teorías económicas vigentes del capitalismo, son
incapaces de dar cuenta de la realidad económica, mucho menos de poder
dar una solución permanente a los factores causantes de la crisis. Lo
que los organismos financieros internacionales y los bancos centrales
de las naciones han hecho ante la descomunal crisis producto de la
desregulación y endeudamiento del sector privado (¿libertad económica?),
han pretendido para mantener a flote sus sistemas financieros y
bursátiles, ha sido emitir deuda y más deuda, para evitar que todo el
sector privado se desplome de manera sistémica. Además, los
bancos centrales, como la Reserva Federal de la FED de EE.UU., no solo
hacen trillonarias emisiones inorgánicas para poder seguir pagando los
gastos básicos estatales, sino que tienen que intervenir en directo en los mercados financieros y bursátiles,
tanto para rescatar bancos, como para la compra directa de activos
financieros y bursátiles (¿tóxicos?), como si fuera otro agente de
mercado y es por eso que las bolsas han hecho verdaderas orgías con
fondos provenientes de los erarios públicos, alcanzando récords
históricos, por eso, es que en la actualidad los mercados aparentan que
la crisis financiera parece ser superada (-Ver: Se acabó el recreo-).
Pero la economía real está desmantelada, por lo que el sector
productivo de la U.E., Japón y EE.UU., no es capaz de echar a andar sus
motores económicos, de tal manera puedan solventar eventualmente tanto
al deuda pública, como la deuda privada. Todo lo
contrario, las deudas siguen creciendo exponencialmente, pues EE.UU
tiene un 86.4% de Deuda Pública y 259.8% de Deuda Privada respecto de su
PIB. Y permanentemente tienen que estar pidiendo al
Congreso de EE.UU. que levante el tope de la deuda, para seguir haciendo
emisiones inorgánicas y así mantener la farsa, que son la mayor
economía del mundo. Pero el sistema total se encuentra colapsado y
tienen que endeudarse para poder pagar sus gastos básicos y seguir
sosteniendo de manera artificiosa el sistema financiero y bursátil
(Ver: Los acreedores advierten:la burbuja de la deuda estallará y provocará la peor crisis).
Aun cuando aparecen informes de algunos indicadores, que parecen ser
positivos, como es el caso que se reporta que el desempleo disminuye, lo
cierto es que luego de cinco años de crisis, los indicadores de
desempleo abierto (atenuados por un subempleo que lo triplica, pues se
contabilizan como empleados diferentes, aquellos que trabajan
fraccionariamente por horas, y en diversos empleos parciales y
temporales), es más lo que ocultan de los millones de personas
desempleadas y que ya no encuentran empleo, ni solicitan asistencia
pública por desempleo, que lo que se reporta oficialmente que es un
7.6%. De hecho los datos no oficiales e independientes, reportan un desempleo abierto de 14,3% (-Ver: Unemployment Is Really 14.3%. -- Not 7.6%).
No obstante, los tanques de pensamiento de sectores conservadores, que
se autodenominan como "liberales", defensores de la libertad, del éxito
económico, de la liberalización de las economías, de la economía de
mercado; en torno a a la actual crisis económica global,
jamás han aceptado la responsabilidad de las teorías económicas a las
que se adhieren, y por medio de una serie de hipótesis auxiliares, ad
hoc, de manera anti-científica, han protegido el núcleo duro sustentador
de sus doctrinas capitalistas. El cinturón protector de hipótesis ad
hoc, se realiza, exculpando la responsabilidad de la desregulación de
los mercados financieros, todo lo contrario a como sí lo reconoció el mismo ex Presidente de la Reserva Federal de EE.UU.: Alan Greenspan, en octubre 23 de 2008, frente al Presidente del Comité de Supervisión y Reforma Gubernamental del Congreso de los EEUU, que investigaba las causas de la crisis financiera (Ver: Greenspan, reconoce su error).
Greenspan, quien estuvo al frente la política monetaria estadounidense entre 1987 y 2006, reconoció que los mercados "deberían estar mucho más regulados para impedir el peor tsunami financiero del último siglo", lo cual es un "mea culpa" tardío, pues mientras estuvo al frente de la FED, aceleró el proceso de desregulación,
que permitió a los mercados financieros multiplicar los sofisticados
derivados financieros o instrumentos derivados como productos
financieros, cuyo valor se basa en los precios de otros activos, tal y como lo son los fondo de inversión libre (Hedge Funds) y las permutas financieras (swaps).
Este tipo de instrumentos financieros derivados, son
contratos privados pactados directamente por las partes, donde se
establece la obligación de comprar / vender un bien o activo en una
fecha futura, fijando hoy el precio y otras condiciones. Esta compra de
activos financieros, estableciendo valores presentes, sobre la base del
precios futuros, encuentra su fundamento teórico en la teoría de la
utilidad marginal, desarrollada por la Escuela Austríaca, por economistas burgueses como Carl Menger, E. von Böhm Baverek o F. Hayek.
De hecho, estas teorías de la utilidad marginal y su análisis del
interés y de los tiempos de producción son uno de los pilares
financiero-corporativos en que se sustenta toda la economía especulativa
y por ende, son por defecto, las factores de fondo, de las burbujas
especulativas y sus estallidos, que tienen hundido al mundo en la crisis
actual.
Las tesis de la utilidad marginal de la
escuela austriaca de economía, son las que facultaron la creación de
gigantescas ficciones financieras, convirtiendo pasivos (deuda privada),
en activos financieros derivados sobre utilidades futuras, y los
cuales, cuando el soporte financiero proveniente del sector trabajo, de
los ahorrantes, de los cotizantes, de los casa-habientes, de los
sustentadores de valor-trabajo real, no pudieron soportar la gigantesca
pirámide ponzi invertida que recaía sobre sus espaldas, todo el esquema
financiero de desplomó, y se dejó caer todo el peso destructivo sobre los trabajadores y los casa-habientes.
Luego de la caída de Lehman Brothers(15 de Setiembre, 2008), la Secretaría del Tesoro de EE.UU., en
vez de dejar caer las instituciones financieras privadas que generaron
la crisis, ante la inminente caída de la aseguradora AIG, que implicaba
un desplome económico sistémico, se iniciaron los mega-rescates
financieros (bail out) de estos activos "toxicos" del sector financiero
privado, llegando incluso a la nacionalización de los bancos más
importantes, convirtiéndo así la deuda privada en pública, pues en caso
contrario, todo el sistema capitalista, se hubiese desplomado y muy
probablemente, EE.UU, hubiese desaparecido como una nación unificada (Ver: Greenspan entona el 'mea culpa' por la desregulación de los mercados financieros ).
Así pues, confiar en la autoregulación de las instituciones financieras de libre mercado (-mano invisible de Adam Smith-),
por parte Greenspan, un economista inspirado en el monetarismo de
Friedman y en el objetivismo de Rand, llevó a estallido de la burbuja
subprime, que obligó a EE.UU. a tomar la dirección inversa para
impedir una caída sistémica del modelo capitalista, pues el Gobierno de
EE.UU. en poco tiempo tuvo que asumir el control de
entidades hipotecarias como Freddie Mac y Fannie Mae, nacionalizó buena
parte del negocio de seguros con su intervención en American
International Group (AIG), compró los paquetes de contro de acciones en
los grandes bancos privados, como también de las grandes corporaciones
automotoras (-Ver: La nacionalización de General Motors -). La deuda pública se disparó, en un intento desesperado de salvar al sector privado de sus gigantescas deudas.
Esto palió el problema temporalmente, pero los factores que generaron
la crisis, no sólo no se subsanaron, sino se incrementaron, y hoy, la deuda privada en EE.UU. es muchas veces mayor que la deuda pública (Ver: La crisis financiera en Estados Unidos). El
efecto dominó sobre el resto de las grandes economías no se hizo
esperar, y este es el momento que las grandes naciones industrializadas,
se encuentran en una caída en espiral de sus economías y nada hace
prever alguna solución de fondo, todo lo contrario, parece avecinarse
una crisis mucho mayor que la iniciada en 2008. (Ver: World debt comparison: The global debt clock http://econ.st/19aKepy, National Debt Clocks From Around The World).
Ya sean las tesis monetaristas, marginalistas, keynesianas o neokeynesianas (-variantes
dentro del mismo sistema capitalista, y que comparten los mismos
errores en sus puntos de partida, como en sus puntos de llegada, aunque
tengan algunas divergencias metodológicas de grado-), ninguna da en clavo, respecto a cómo solventar el problema, pues renuncian a reconocer, que el problema se origina en el desface entre las relaciones de producción y los medios de producción. Ni los estímulos
neokeynesianos (Paul Krugman), ni la austeridad hayekiana (medidas
similares impuestas por la Troika en la Zona Euro, pero las que afectan a
la población, no a las instituciones financieras privadas que
provocaron la crisis, como sugirió Hayek, porque si lo aplicaran, la
contracción monetaria sería tal, que la economía mundial volvería al
medioevo), ni el monetarismo expansivo friedmaniano (EE.UU. en la era
Greenspan y luego convertido por Bernanke, en un neo-keyne- monetarismo,
aplicando salvamentos billonarios a los bancos y las bolsas a costa del
erario público, por lo que es un frankestein neokeynesino-friedmeniano,
ver: “Is Fed chairman Ben Bernanke a follower of John Maynard Keynes or Milton Friedman?”, Bernanke's Monetarism Is a Logical Impossibility) no han dado muestras, que hayan acertado para resolver los factores de fondo de la gran recesión económica (-Ver: Crisis económica de 2008-2013-).
Todo lo contrario, los más conspicuos "liberales" se mantienen porfiadamente apelando a las recetas del fundamentalismo
de mercado, por lo que, proyectan su responsabilidad y deforman la
realidad, apelando a que nunca se liberalizó lo suficiente los mercados o
las inversiones monetarias, que sus regulaciones fueron las causantes
de la crisis, y que más bien, lo que se han tomado son soluciones de "socialismo monetario" (-escandaloso oxímoron-)
o expansionismo monetario, al cual acusan de ser el causante de la
crisis. Esta negación de los fallos endógenos a los mercados
desregulados, más que errado es perverso y muestra un problema más que
económico, de carácter ético. Este tipo de proyecciones de sus propios errores, deriva en una esquizofrenia económica,
pero que es asumida como una explicación válida, por muchos de los
crédulos seguidores de tales doctrinas liberales, lo cual evidencia que el fundamentalismo de mercado es un fenómeno más cercano a la religión que a la ciencia.
Pero estos "liberales", o más bien "pseudo-liberales" (-basados
en un falacioso concepto de libertad burguesa, del acaparamiento de los
recursos y servicios que son públicos, por parte del Sector Capital-), apelan permanentemente a los índices de libertad económica, elaborados por Tanques de Pensamiento (Think Tanks) ultra-conservadores, como: Fraser Institute y Heritage Foundation. Según esta última, lo
que se busca medir es como las instituciones básicas que protegen la
libertad de los individuos para perseguir sus propios intereses
económicos y como esta libertad se traduce en prosperidad para la
sociedad. Entre los países mejor raqueados en esas listas de libertad económica, se encuentran: Hong Kong, Singapure, Nueva Zelandia, Australia, Suiza, Canadá y por América Latina, el mayor exponente es Chile.
Pero no se muestran datos sobre sus realidades sociales concretas, sobre sus encadenamientos
productivos, sobre las relaciones sociales de producción, sobre las
condiciones del sector trabajo, sobre sus niveles de pobreza, sobre su
exclusión social, y más bien se ignoran indicadores como el Coeficientes
de Gini y otros que revelan diversos factores sociales, pues
fraccionan lo social de lo económico y de los político; dejando
en evidencia que su metodología clasificatoria, no sólo es incompleta,
sino fragmentaria de las dinámicas reales de los sistemas sociales.
Esto, en un momento, que los investigadores de punta, para dar cuenta de la realidad social y económica, apuntan a modelaciones de sistemas dinámicos y complejos, a modelos no determinísticos (caóticos) y probabilísticos, que permitan hacer una aproximación a los patrones de interacción dinámicos de las múltiples variables y sus valores dentro de un sistema económico (Ver: “Probabilidad, economía y la teoría del valor trabajo (E. Farjoun & M. Machover)” , A new attractor for the rate of profit (Paul Cockshott, Allin Cottrell and Tamerlan Tajaddinov) http://bit.ly/1amQuvS, Econophysics and the complexity of financial markets, Political economy: value and labour, Econophysics of Stock and Other Markets http://bit.ly/1bOYcwO, Econophysics — Economics E-Journal, Hyperion International Journal of Econophysics & New Economy).
Esto, en un momento, que los investigadores de punta, para dar cuenta de la realidad social y económica, apuntan a modelaciones de sistemas dinámicos y complejos, a modelos no determinísticos (caóticos) y probabilísticos, que permitan hacer una aproximación a los patrones de interacción dinámicos de las múltiples variables y sus valores dentro de un sistema económico (Ver: “Probabilidad, economía y la teoría del valor trabajo (E. Farjoun & M. Machover)” , A new attractor for the rate of profit (Paul Cockshott, Allin Cottrell and Tamerlan Tajaddinov) http://bit.ly/1amQuvS, Econophysics and the complexity of financial markets, Political economy: value and labour, Econophysics of Stock and Other Markets http://bit.ly/1bOYcwO, Econophysics — Economics E-Journal, Hyperion International Journal of Econophysics & New Economy).
Por ende, las clasificaciones de los índices de libertad económica, se basan en recetarios arbitrarios y fragmentarios de los sistemas económicos, es decir, son una burda escolástica económica anti-científica, más bien, recuerdan las preocupaciones bizantinas, como: "¿cuántos ángeles caben en la punta de una aguja?, tales
clasificaciones, ad hoc, recuerdan las clasificaciones medievales,
sobre los distintos niveles de cielos y ángeles que los habitan, sus
jerarquías y sus facultades, y preocupaciones, cómo si los ángeles de un
nivel superior, conversan con los de los niveles anteriores. Por
muy sofisticados que parezcan estos índices, que en vez de ideólogos
religiosos (teólogos), ahora los hacen ideólogos capitalistas
(economistas burgueses), no son capaces de dar cuenta de las realidades
materiales de las relaciones de producción que sustentan un sistema
económico, por lo que son gigantescos castillos de naipes, que si se
confrontan con datos empíricos sobre los generadores de riqueza real, de
la economía fáctica, se derrumban por completo. No
obstante, aunque hoy en día, cualquier mente científica reconocería que
los ángeles son ficciones literarias, aun hoy en día persisten los
"angeólogos", apelando a pseudo-realidades, como se si estas pudieran
ser corroboradas y sin duda, mucha gente, aceptará sin dudar lo que los
angeólgos repitan enfáticamente como guías para sus vidas. No obstante,
esto en las economía reales, eventualmente tendrá efectos graves.
Nueva
información sobre las deudas privadas de las naciones del mundo,
produce una falsación poppereana, sobre los principales postulados del
núcleo duro teórico, que sostienen estos ranking de índices de libertad
económica (Economic Freedom of the World project / Economic Freedom by Country – 2013 Ranking).
Esto pues, los países mejor rankeados en los índices de libertad económica, no solo evidencian sistemas sociales en deterioro o deteriorándose a pasos agigantados, sino, evidencian las deudas privadas más altas del mundo. La pregunta de base que surge, es cómo se plantea la relación directa entre "libertad económica" y endeudamiento privado. Bastaría con comenzar a relacionar los distintos criterios que se asumen para realizar tales rankeos y cómo estos inciden en el endeudamiento privado. Un primer criterio, es el tipo de estado de derecho, que es burgués, particularmente de perfil neoliberal, que ha sido modificado para permitir el libre flujo de capitales y de activos, y permite al sector empresarial privado, disponer de flujos dinerarios, cuasi-irrestrictos, acentuado por la flexibilización cuantitativa, las bajas tasas de interés, los débiles controles y cargas fiscales, las transferencias líquidas instantáneas, las inversiones bursátiles electrónicas por medio de algoritmos de alta frecuencia y en no pocas ocasiones, por medio de la legitimación de capitales y activos, que ha resultado ser una práctica muy frecuente en el sector finaciero (Ver: Los pecados del HSBC: lavado de dinero, fraude del LIBOR y evasión fiscal ).
Ante tales circunstancias, el sector capital o empresarial, se
endeuda sin límite, pues sabe que en por defecto los gobiernos
intervendrán para rescatarlos con deuda pública, y harán pagar a los
pueblos sus deudas, con recortes a los activos y servicios públicos y
demás medidas de austeridad, pero nunca se tocarán los intereses del
gran sector capital, que "libremente podrá seguirse endeudando". Por ende, otros criterios como: "libertad comercial, libertad laboral, libertad monetaria", se definen en función de los intereses del sector capital o empresarial, por lo que el
Sector Trabajo, jamás llega a acceder a los beneficios comerciales,
laborales o monetarios y por ende, nunca accederán a tales libertades,
más bien, se convierten en criterios de esclavitud laboral y en espirales de pauperización obrera. Los mismo aplica para otros criterios, como: "la apertura de mercados, la libertad comercial, la libertad de inversión, la libertad financiera", que más bien,
fomentan la ausencia de garantías laborales y sindicales, el
sometimiento a jornadas laborales que transgreden los derechos básicos,
salarios de explotación, esclavitudes de deudas, la gradual desaparición
de los pequeños agricultores y comerciantes, aumento de franjas de
pobreza, miseria y desnutrición infantil, etc. En breve,
estos criterios de "libertades", ensamblados a la medidas de los grandes
capitales transnacionales, terminan por triturar el sector
trabajo, convirtiendo a millones de seres humanos en esclavos
contemporáneos. Bajo el paraguas de "apertura de mercado" se han subsumido, como en el caso del
sector agro-alimentario, el desmantelamiento de millones de campesinos y
agricultores de todo el mundo, en función de acaparamiento de la
producción y de la distribución alimentaria, y casos paradigmáticos, lo son Monsanto o Wall Mart (- Ver: MONSANTO – Miles de campesinos se suicidan en la India, Lo que ellos no dicen acerca del TLCAN (NAFTA), Pobreza. marginación y migración consecuencias del TLCAN-, Wal-Mart La Trasnacional de la Pobreza, Illegal Immigration and NAFTA). Por lo que tales criterios de "libertad", sea comercial, de inversión o financiera, son perversas farsas,
que no aplican más que a reducidos grupos del sector capital, en
contubernio con los sectores políticos dominantes y que en no pocas
ocasiones, los empresarios se convierten y políticos y viceversa, y el círculo perverso se perpetúa (Ver: La puerta giratoria en la política estadounidense, Del Gobierno a la empresa: la 'puerta giratoria' no cesa).
Por eso, resulta muy curioso, que estos autodenominados como "liberales", han ignorado la relación entre los indicadores de libertad económica y los niveles de Deuda Privada en el Sector Capital,
respecto al PIB en las naciones mejor rankeadas. Es decir, se trata de
un sesgo alevoso, con el objetivo de adecuar los hechos a sus teorías,
lo cual es el peor de todos los errores/horrores epistémicos posibles.
Se comparan a continuación los siguientes indicadores:
Estos datos revelan que aunque algunas naciones queden
calificadas en los primeros lugares en los índices de libertad
económica, alcanzan niveles descomunales de de Deuda Privada con
respecto al PIB, lo cual muestra, que el problema no es tanto el
endeudamiento público de los estados, sino la manera artificiosa, que
el sistema ha encontrado cómo financiar los agentes privados de los
mercados. Los criterios de libertad económica, que han pasado a ser
institucionalizados y legalizados, permiten primero privatizar los
sectores conspicuos del mercado, luego monopolizarlos, luego realizar
libre flujos de capitales por medios de gigantescos préstamos
interbancarios e intercorporativos con manipulación de las tasas de
interés (Ver: El escándalo Libor se convierte en el mayor fraude de la historia para millones de consumidores), de evasión de impuestos colocando las utilidades en paraísos fiscales (Ver: Los paraísos fiscales más atractivos de la UE). Esto
abre toda una heurística de investigación, cómo lo es, la proporción
directa entre este tipo de desregulación o libertad económica, con la
generación irrestricta y sin techo alguno de Deuda Privada.
La paradoja, es que el sector privado, dentro de un sistema capitalista, debe ser un motor de la economía real, pero todo lo contrario, se ha vuelto un lastre tan pesado, en especial en las naciones con más desregulaciones o "libertad económica", la cual amenaza hundir sus respectivas naciones, en la insolvencia y la quiebra total. En el momento en que las devaluaciones monetarias, los déficit públicos y privados, hagan imposible seguir emitiendo deudas inorgánicas, por medio de opacas estrategias de flexibilización cuantitativa de los Bancos Centrales, toda la economía de estas naciones "económicamente libres", se derrumba como un castillo de naipes.
Los índices de libertad económica, son máscaras, farsas, que
encubren lo que sucede integralmente en los sistemas económicos, en sus
encadenamientos productivos y en las relaciones sociales de producción. Este es el caso de Hong Kong y Singapure, que muestran por sus coeficientes de Gini, que tienen sociedades esclavizadas a la pobreza y la exclusión. Evidencia
que las naciones con mayores índices de libertan económica, minimizan
la inversión en el sector social, en lo que es el estamento base de toda
sociedad, es decir, en el sector trabajo que es el productor de riqueza
real, y en favor del sector Capital; de ahí, esto permite establecer
una relación directa, entre los índices de libertad económica, y la
acumulación dineraria en el Sector Capital. Pero cuando el Sector
Trabajo es explotado y pauperizado, las relaciones de producción que
sostienen todo el sistema, se resquebrajan también. Para solventar este
daño estructural, que debilita la producción de riqueza real de un
sistema, se requiere un apalancamiento financiero inorgánico al Sector
Capital, por medio del cual pueda mantener su aparente funcionalidad
productiva; pero esto es una pirámide de esquema Ponzi invertido,
y donde la punta de la pirámide en la parte inferior es el Sector
Trabajo, que aunque sostiene toda la Pirámide Ponzi
financiero-especulativa, se encuentra completamente triturada. Esta
pirámides Ponzi invertidas, son las que se benefician por las
desregulaciones financieras, y entre más gigantes son, en apariencia son
más "exitosas" y por ende, les permite colocarse entre los primeros
lugares de los índices de "libertad económica", que son como camisas
hechas a la medida, aplicando el principio de Procusto.
Pero, estas pirámides Ponzi se sostienen sobre la base de deudas
y déficit en el sector capital y por ende, generan las
gigantescas Deudas Privadas, y lo que indican es un ficticio y
fraudulento su éxito económico (Ver: How the Economy Is a Ponzi Scheme).
El caso de Chile en América Latina, es paradigmático, pues aunque se encuentre entre los primeros lugares de libertad económica, se coloca en el lugar 141 del Coeficiente de Gini, lo que evidencia, que su modelo de desarrollo económico, de la libertad económica,
se basa en una gran exclusión social, en una pauperización permanente
del grueso de la población, para la cual no existe "libertad económica",
ni ningún tipo de libertad, tan sólo explotación, pobreza, miseria y
hambre.
- * “DEUDA TOTAL PÚBLICA Y PRIVADA DE COSTA RICA REPRESENTÓ EL 104.4% DEL PIB PARA EL AÑO 2012”
- * PRIVATE Debt Is the Main Problem
- * Alan M. Taylor: “The Great Leveraging
- * The Debt Crisis is Private, not Public |
- * The Private Debt Problem In Europe
- * Public debt, private responsibility |
- * Public Debt and Economic Growth: Correlation is Not Causation
- * José Luis Ferreira. Economía y pseudociencia
- * José Luis Ferreira. “¿Es la escuela austriaca una pseudociencia? Juzgue usted (1)”
- * José Luis Ferreira. “¿Es la escuela austriaca una pseudociencia? Juzgue usted (y 2)”
- * World debt comparison: The global debt clock | The Economist
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